Este año estamos viviendo semanas donde la olas de calor son protagonistas, por eso es importante que tengas en cuenta qué hacer si estas altas temperaturas te juegan una mala pasada.
Especialmente en nuestros mayores, debido a que personas mayores de 65 años son más vulnerables al calor, se puede deber a una exposición reiterada en altas temperaturas o de realizar ejercicio físico durante las horas más calurosas. Desde la Residencia Montes Orientales, como especialistas en el cuidado de personas mayores, queremos que identifiques cuáles son los síntomas de golpe de calor en personas mayores, para poder actuar en caso de que sea necesario y evitar, en la medida de lo posible, que esto ocurra.
Causas de un golpe de calor en mayores
Las personas mayores, junto a los niños, son los que más probabilidades tienen de sufrir un golpe de calor. Esto se puede deber a dos causas:
Edad
Una de las causas que puede provocar un golpe de calor en mayores es la edad, porque a medida que vamos cumpliendo años, la sensación de calor en el cuerpo es cada vez menor. Es decir, las personas mayores no son conscientes de las altas temperaturas en verano, y no se protegen suficientemente del calor.
Deshidratación
La deshidratación guarda una relación directa con la edad. Al igual que ocurre con la sensación de calor, a medida que envejecemos, la percepción de sed es cada vez menor, por tanto, las personas mayores no tienen necesidad de beber tanta agua, pudiendo llegar a deshidratarse sin a penas notarlo.
Otra de las causas son los medicamentos; hay ciertos medicamentos que disminuye tanto la percepción de calor, e incluso uno de los efectos secundarios es la incapacidad de que el cuerpo se adapte y regule la temperatura cuando hace mucha calor.
Síntomas golpe de calor en mayores
Identificar algunos síntomas de un golpe de calor en mayores, al parecer, es bastante sencillo, aunque puede que parezca confuso junto con otras dolencias de la edad.
Los síntomas que indican de un golpe de calor en mayores son:
- Sentir el cuerpo con cierta debilidad.
- Tener mucha sed y la boca seca sin salivación.
- Aumento de la temperatura o incluso fiebre.
- Dificultad a la hora de hablar, confusión, desorientación.
- Dolor de cabeza.
- Náuseas.
- Escalofríos.
- Vómitos.
- Desmayos.
- Dolores de estómago, fatiga, o falta de apetito.
- Pulso muy alto.
- Piel enrojecida.
- Hiperventilación.
Consejos para actuar en caso de golpe de calor
En caso de que una persona mayor esté sufriendo un golpe de calor, debes actuar de la siguiente forma:
- En primer lugar, llamar a urgencias si consideras que la situación es grave, mientras tanto sigue los siguientes pasos.
- Poner a la persona mayor a la sombra, si puede ser tumbado y con las piernas en alto, mejor, de esta forma haremos que la sangre circule más fluido y no pierda el conocimiento.
- Mantén las zonas de la nuca, frente, muñecas, etc. mojadas para hacer que le baje la temperatura y que se le estabilice.
- Ofrecerle agua y que beba poco a poco; el agua no debe estar muy fría y que no beba de golpe (*muy importante), de lo contrario puede provocarle vómitos y generar más deshidratación.
- Si se encuentra en espacios cerrados, es importante evitar que el sol entre; bajar persianas, echar las cortinas, etc.
- Intentar seguir una dieta saludable que incluya comidas más frescas y sean más ligeras.
¿Se puede prevenir un golpe de calor en mayores?
La mejor forma de prevenir un golpe de calor en mayores es conociendo el nivel de atención que necesita persona mayor y aumentando el cuidado durante la época de más calor, uno de los consejos para esto es contar con profesionales que sepan qué hacer en cada momento e incluyan diferentes rutinas que les mantengan alejados de las horas donde el calor está más presente.
Otras formas de regular el calor corporal y evitar los golpes de calor en personas mayores son:
Usar ropa ligera
Con usar ropa ligera nos referimos a utilizar prendas de colores claros, ya que por ejemplo, el color negro atrae el calor. Además de esto, complementos como gorras o sombreros impiden el contacto directo con el sol y nos protege de él.
Mantenerse hidratado
Mantenerse hidratado es importante, sin importar la edad, pero aún más si estamos en pleno verano y si se trata de una persona mayor. Para ello:
- Tomar 1,5 litros o 2 de agua a lo largo del día, evitar el sol desde las 12 del medio día hasta las 16 de la tarde.
- Cuidar la alimentación, como ya hemos dicho anteriormente, evitar platos más calientes y añadir platos fríos y ligeros como ensaladas, gazpacho…
- Hidratar la piel también es importante en estos casos, tomar una ducha antes de salir a la calle con cremas solares que les proteja del sol.
Dentro de casa
Es importante que dentro de casa también se tomen precauciones, como permanecer en las estancias donde haga menos calor y durante las horas que haga más calor, baje las persianas y echar las cortinas, evitando que el sol entre directamente.